En el siglo XVII, los soberanos europeos disponían en sus palacios de una serie de estancias reservadas a su uso particular denominadas cámaras. Con frecuencia reunían en ellas a sus músicos de corte, dando así origen a lo que terminaría en llamarse música de cámara.

El término música de cámara se utiliza para designar todas aquellas composiciones musicales destinadasmusicadecamara2 a ser interpretadas por solistas, pequeños conjuntos de instrumentistas, o bien orquestas que constan de un reducido número de miembros. En origen, los músicos puestos al servicio del rey se distribuían en tres grupos, según el lugar en el que interpretaran sus creaciones: los de cámara, los de capilla y los de caballerizas. Sin embargo, fue la primera de las denominaciones la que prevaleció y se generalizó posteriormente. Estos artistas, tanto instrumentistas como cantores, participaban en los conciertos privados y también en las fastuosas celebraciones palatinas. En ambos se ejecutaban piezas de la más diversa naturaleza, que, a medida que la música de cámara adquiría mayor prestigio, iban definiendo su estructura. Así nacieron composiciones tales como el concierto de cámara, la sinfonía de cámara y, los más característicos de la modalidad, el cuarteto, el quinteto y el sexteto.

Tradicionalmente, en la interpretación de las obras de cámara predominan los instrumentos de cuerdas. Así, por ejemplo, la más significativa de las formas de composición en este ámbito, el cuarteto de cuerdas, se ejecuta con dos violines, una viola y un violonchelo. También es frecuente la intervención de claves, laúdes e instrumentos de viento.

Compositores más importantes del nuevo estilo:

     El periodo de transición entre 1750 y 1775 se caracteriza por una cierta ambigüedad: los compositores quieren desahogar su corazón, pero sólo disponen de los medios técnicos del barroco. Muchos intentan librarse de ellos, pero la mayoría de las veces sus esfuerzos sólo van en una dirección, lo que hace que en parte queden neutralizados.

     La tarea del artista clásico será restablecer la coherencia del lenguaje musical. Para ello deberá rechazar los elementos barrocos, ya caducos, y crear un estilo nuevo apoyándose en las experiencias de estos años de transición.

musicadecamara4Pero no todos los compositores podrán conseguirlo. Muchos conservarán parte de la herencia barroca, especialmente en el ámbito de la forma y de la armonía. Sólo unos pocos conseguirán dominar totalmente los distintos elementos del lenguaje musical: Haydn, Mozart y Beethoven serán los tres representantes del nuevo estilo. Entre ellos existirán puntos comunes en cuanto a las concepciones musicales, pero sobre todo estarán unidos por ese nexo cualitativo que constituye su aptitud para realizar la síntesis de las nuevas posibilidades experimentadas desde 1750. Como escribía E. T. A. Hoffmann en 1814, «Haydn, Mozart y Beethoven llevaron a enormes alturas una nueva forma de arte cuyos orígenes se remontan a mediados del siglo XVIII.

     Sin duda la aportación más importante de los tres maestros occidentales se desarrolló en el ámbito de la música de cámara. La originalidad de estros tres compositores se revelará con mayor vigor en el cuarteto para cuerdas. Haydn puede ser considerado como el principal promotor del cuarteto. Abandona la práctica del “cuarteto de primer violín”, e intenta obtener un equilibrio entre las parejas. El alto (viola) se va independizando poco a poco y se vuelve temático, o desarrolla motivos que le permiten liberarse de su función de mero apoyo armónico. Las intervenciones en pizzicato (pellizcar la cuerda) aportan un elemento de variedad.

     Las obras de madurez de Haydn ejercen una influencia claramente perceptible en Mozart, cuyos primeros cuartetos adoptan un estilo italianizante. Sin embargo, Mozart experimenta combinaciones de otros instrumentos, atraído por el timbre dulce y expresivo de la viola, por lo cual experimenta con quintetos (dos violines, dos violas y un violoncello). Los divertimenti o canciones, son suites de movimientos o danzas, de estructura muy libre, que recurre a menudo a instrumentos de vientos.

     Algunos años más tarde (1798-1799), Beethoven empieza su primera serie de seis cuartetos y también experimenta con sus tríos para cuerdas. En Beethoven predomina el virtuosismo del primer violín.